A medida que la frecuencia de los ciberataques sigue aumentando y los ciberdelincuentes se vuelven más descarados con las campañas, los seguros ciberriesgo se van haciendo cada vez más populares. ¿Sabes qué son y cómo funcionan?

¿Qué es un seguro ciberriesgo?

Un seguro de ciberriesgo es un póliza de seguro que ayuda a proteger a las organizaciones de las consecuencias de los ciberataques y las amenazas de piratería informática. Como os recordamos frecuentemente en este blog, los ataques informáticos son cada día más frecuentes y las aseguradoras hace años que lanzaron este producto que protege a las empresas de las pérdidas relacionadas con incidentes informáticos o basados en la red.

Un seguro de ciberriesgo también toma los nombres de ciberseguro o seguro de ciberresponsabilidad

Las consecuencias de la situación sanitaria actual han acelerado la tendencia y no son pocas las empresas que cuentan con uno.

Lo que no te cuentan

Sin embargo, hay cosas contra las que el seguro cibernético no puede proteger y una organización tendrá que asegurarse de que entiende lo que está cubierto y, tal vez más importante, lo que no está cubierto cuando se suscribe a un plan de cobertura. Es decir, para que este seguro sea efectivo, han de cumplirse unas condiciones mínimas de seguridad previa.

¿Qué cubre un seguro ciberriesgo?

Obviamente, cada aseguradora puede ofrecer cobertura de diferentes situaciones, pero en general la cobertura del seguro cibernético probablemente cubrirá sólo los costes inmediatos asociados a ser víctima de un ciberataque. Por ejemplo, en un ataque de ransomware:

  • Recuperación de datos (de ser posible)
  • Análisis forense del sistema
  • Costes de la defensa legal
  • Reparaciones económicas a los clientes

 

¿Qué NO cubre un seguro ciberriesgo?

Una vez más, depende de la aseguradora y de qué contrato se firme pero, en rasgos generales, existen puntos clave para las empresas que no suelen estar cubiertas por el seguro cibernético: es vital entender lo que no está cubierto, de modo que la protección de estos activos pueda gestionarse adecuadamente. Por ejemplo, no suelen estar cubiertos:

  • Ataques de phishing
  • Las pérdidas a medio y largo plazo (por imagen, por percepción, etc…)
  • Restitución de la reputación
  • Ningún gasto si no se cumplen las medidas de seguridad previas estipuladas

 

Por lo tanto, las empresa deben asegurarse de que saben exactamente lo que están firmando cuando eligen una póliza de seguro de ciberseguridad – y que cubre los daños potenciales de los ciberataques más probables, incluyendo ransomware, phishing y ataques DDoS.

Te ayudamos con tu seguridad

En keykumo no vendemos ciberseguros pero nos aseguramos que, por ejemplo, si contratas uno cumplas todos los requisitos para que te cubra la póliza. Somos especialistas en ciberseguridad, ¿te ayudamos?

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