Corría el año 1990 en el calendario y Windows 3.0 en nuestros ordenadores. El juego del solitario, en su variante Klondike, arrasaba entre jóvenes adolescentes y empleados de corbata que disfrutaban de las bondades de la recién adquirida interfaz gráfica. Han pasado 26 años desde entonces y Microsoft anuncia una segunda revolución del solitario – y es que, en realidad, nunca se fue. 

Un origen sorprendente

Lejos de responder a un propósito meramente lúdico, la jefa de producto Libby Duzan confesaba en una entrevista que el solitario fue introducido en Windows con el objetivo de que aprendiéramos a utilizar el ratón.

Si algún millenial está leyendo esto, probablemente se pregunte de qué hablamos. Pues bien, antes de las interfaces gráficas, de los ratones y de Windows – porque había vida antes de Windows -, manejar un ordenador era enfrentarse a líneas de código que respondía a comandos imputados por un teclado. En los 80, aparecieron los primeros ordenadores con interfaz gráfica y ratón; el problema era que también venían con otro complemento mucho menos atractivo en forma de varios ceros. El Windows 3.0 supuso que, en poco tiempo, millones de usuarios incautos se enfrentasen a una nueva informática, alejada de todo lo que habían manejado hasta el momento.

Con la ayuda del solitario – y posteriormente el buscaminas, introducido en Windows 3.1 -, aprenderíamos a manejar dignamente el ratón, especialmente la utilizar «agarrar y soltar» (drag&drop), el clic derecho/izquierdo y la precisión. Lo que entonces no sabía Microsoft es que, más que una herramienta de aprendizaje, acababan de crear un monstruo.

El becario sí lo sabía

Sin sospechar en la importancia que cobraría en las vidas de millones de trabajadores, el código fue obra del entonces becario Wes Cherr. El joven, en su Windows 2.1, había desarrollado una versión del juego de cartas para matar el tiempo en lugar de estudiar para los exámenes de la universidad. Cuando entró en Microsoft con una beca y por azares del destino, uno de los program manager descubrió su programa y decidió incluirlo en Windows 3.0 – no sin antes eliminar el «botón del pánico». Cherr, consciente de la potente adicción que causaba el juego, había decidido incluir una clave maestra para evitar ser descubierto in fraganti: al pulsar un comando, la pantalla se llenaba de código aleatorio, evitando las miradas indiscretas del jefe.

El solitario pronto se convirtió en la aplicación más usada de Microsoft – al menos según Chris Seller, el actual program manager de Microsoft Developer Network. Un uso que, por cierto, no siempre se ha dado en los tiempos de descanso. Si ahora nos preocupamos por las redes sociales, en aquellos años la gran preocupación por la productividad de las empresas era el solitario. Desde empleados preocupados por mantener la puntuación más alta de su empresa a funcionarios estatales despedidos, las historias y anécdotas han ido amontonándose hasta crear la leyenda que es ahora este juego.

Sin embargo, Microsoft parece que no se contenta con los 100 millones de usuarios únicos y quiere darle una nueva vuelta de tuerca a este juego.

El misterioso nuevo solitario

Con Windows 8 llegó a nuestros ordenadores Microsoft Solitaire Collection: 5 juegos diferentes de solitario (Freecell, Londike, Spider, Pyramid y Tripeaks) en una sola aplicación que puedes descargar gratuitamente desde la tienda. ¿Y dónde está la noticia? En el nuevo modo de juego Events, con la que el solitario podría no serlo nunca más. Sin dar muchas pistas, y con el vídeo que te mostramos a continuación, Microsoft promete una modalidad en la que puedes ganar «miles de premios» y ver cómo «se comparan con tus amigos y la comunidad» mientras construyes «tu legado en el Solitario». Advertencia: este vídeo puede generar más dudas de las que tienes en este momento.